BROWNIE DE REMOLACHA Y CHOCOLATE NEGRO SIN GLUTEN

Me he llevado una grata sorpresa al descubrir el brownie de remolacha y chocolate. En mi familia somos unos apasionados del chocolate negro, tanto es así que el chocolate de Lindt de postres al 70% de cacao, con el que he hecho el brownie, nos lo comemos así tal cual, de la tableta directamente, y es que nos encanta su sabor intenso a cacao. 

Para la receta me he inspirado en el blog "La guinda del pastel" del que soy fiel seguidora, porque también tiene muchas recetas sin gluten.

El brownie es un bizcocho crujiente por fuera y jugoso por dentro, originario de Estados Unidos de finales del siglo XIX, cuyo principal ingrediente es el chocolate.  Su origen está en un cocinero al que se olvidó echar levadura a un bizcocho de chocolate. 

Pero a nuestro brownie hemos echado una cucharadita de las pequeñitas de levadura para crear un textura un poco más esponjosa.

El brownie de remolacha es menos convencional  que las distintas versiones más clásicas que existen con frutos secos como nueces, almendras o avellanas. 

Me encanta la textura que aportan las hortalizas a los bizcochos, como la zanahoria, la calabaza o el ruibarbo. Lo mejor de incorporar hortalizas a los bizcochos es que ganan en textura, además de aprovechar sus propiedades nutritivas, y no predomina el sabor de la hortaliza, así  que los niños ni las notan.

En este brownie utilizamos la raiz de la remolacha cocida que es gruesa, carnosa y de color rojo intenso. Es una carne rica en azúcar fibra, vitamina B, yodo, sodio y potasio.

Para hacer el brownie he comprado la remolacha que venden en bolsas en el supermercado ya cocida, lista para cocinar o echar a las ensaladas.

Es recomendable utilizar un molde cuadrado o rectangular porque los brownies normalmente se sirven cortados en cuadraditos.

Y aunque recomiendan no echar sal al brownie en el caso de que utilices en la receta mantequilla con sal,  sí que le he echaremos 4 granitos de sal rosa del Himalaya, porque me encanta el gusto que da masticar esta sal cuando te la encuentras en un trocito.

Eso sí, el cacao que utilizamos en polvo debe ser el puro sin  azúcares añadidos. He utilizado el de la marca de Valor que no tiene gluten.

Os digo que la remolacha le da un punto diferente, y además secreto, ya que si no les comentáis a vuestros comensales nuestro ingrediente secreto, ellos no lo van a notar.


Ingredientes:

• 1 remolacha cocida (unos 290 gr.)
• 200 gr de mantequilla con sal Mercadona a temperatura ambiente
• 1 tableta de chocolate para postres  Lindt 70% cacao
• 200 gr azúcar moreno glass
• 3 huevos tamaño M
• 60 gr de harina sin gluten Mix C de Schar
• 30 gr de cacao puro en polvo desengrasado Valor
• 1 cucharadita pequeña de levadura en polvo sin gluten Mercadona
• Pizca de sal rosa del Himalaya
• Nuez moscada

Preparación:

• Hacemos glass el azúcar moreno. Reservamos.
• Tamizamos la harina, el cacao en polvo y la sal. Reservamos.

• Trituramos la remolacha cocida y la colamos en un chino para quitarle todo el jugo sobrante. Reservamos.

• Batimos la mantequilla con sal a temperatura ambiente y el azúcar, hasta que quede una crema blanquecina y aumente de volumen. 

• Vamos añadiendo los huevos a temperatura ambiente de uno en uno. 

• Derretimos la tableta de chocolate en el microondas a temperatura intermedia a golpes de 30 segundos, con cuidado que no se nos queme.

• Cuando lo tenemos derretido y templado lo añadimos a la mezcla de mantequilla, huevos y azúcar.
  

• Añadimos la remolacha y removemos.
• Añadimos el tamizado de harina, cacao en polvo y sal, y removemos.
• Añadimos un poquito de nuez moscada triturada y un poquito de sal rosa del Himalaya, y removemos.
• Volcamos la mezcla en un molde cuadrado  o rectangular, previamente forrado con papel vegetal. Para ello cortamos dos tiras de papel del ancho del fondo y lo pegamos al molde con mantequilla derretida a temperatura ambiente.
• Metemos en el horno previamente calentado a 180ºC con temperatura arriba y abajo. Ponemos un papel vegetal en la bandeja del horno para evitar que se nos queme. Tarda unos 30 o 35 minutos. No obstante vamos pinchando con un palillo de madera, de los de comer comida china, hasta que nos salga seco.

Animaros a hacerlo, que es muy fácil y el resultado espectacular. Se puede tomar frio de la nevera, en este caso nos quedará un poquito más duro por dentro. O pegarle un golpe de microondas y tomarlo templado con un helado de nata, vainilla o mantecado.

Probarlo vosotros mismos y ya me contaréis. Buen provecho!!